Las sociedades libres son sociedades en movimiento, y con el movimiento viene la fricción, como bien dice Salman Rushdie, la gente libre suelta chispas, y esas chispas son la mejor prueba de la existencia de libertad. Las sociedades totalitarias tratan de sustituir las muchas verdades de la libertad por la verdad única del poder, sea secular o religioso; de detener el movimiento de la sociedad, de apagar sus chispas.
Lo acontecido recientemente en Patagonia es un ejemplo de lo anteriormente citado.
Mañana comienza un nuevo ciclo de prohibiciones a la escalada en Asturias, un año más, y aquí no pasa nada. Prohibiciones en zonas al lado de polígonos industriales, prohibiciones al lado de autopistas, prohibiciones al lado de ríos de color negro. Sin embargo, hay más proyectos de estaciones de sky en zonas oseras con el OK de las autoridades competentes, que son las mismas que nos prohíben escalar, y ahora con la nieve caída se olvidan de los cuatro meses de sequía y lloros en los medios de comunicación.
Claro, aquí no hay pasta, ni apretones de manos, ni nada, aquí hay que poner la cara, ¿gratis? Y eso, no mola nada.
¿Manos limpias? |
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