Se ha ido uno de los principales iconos del movimiento de la escalada deportiva, precursor, mito, ídolo. Su figura ha sido guía para escaladores de varias generaciones, las primeras de la escalada deportiva. Un místico de la vertical. El placer del movimiento en la naturaleza, el recogimiento de la persona en la roca, el yoga vertical, como bien el decía. Gran Patrick Edlinger.
En septiembre del año 94, lo vi escalar en Cimai, de lejos parecía un joven teen o veinteañero, melena al viento, haciendo series en una vía ligeramente desplomada pero que parecía que tenía buenos cantos. El joven ya no era tan joven, debía de tener de aquella la edad de Cristo, 33. La vía de las series y ligeramente desplomada era un 8b, de pequeña presa. De regreso al aparcamiento nos lo cruzamos, lo acompañaba una bella mujer rubia de pelos largos, el saludó mirando al suelo. Al día siguiente nos lo volvimos a cruzar, también hizo sus series en aquella vía de 8b, ligeramente desplomada de cantos pequeños, también se fue mirando al suelo. Compañero de otro mito, grandes Patricks, hoy, por vosotros, miramos al cielo.
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